Hacer este proceso de observar con los sentidos funciona en una conversación con NeuroTípicos porque los estímulos tiene un parámetro promedio entre ellos y estas son experiencias con las que pueden vincularse entre ellos.
Cuando estamos hablando de una experiencia neurodivergente los sentidos pueden percibir de forma distinta. Una persona Neurodivergente puede tener mucho más sensibilidad o mucho menos en los sentidos por lo que la experiencia puede ser más difícil de compartir. He visto recientemente ejercicios de sensibilización donde ponen auriculares a las personas y ponen el sonido de fuegos artificiales de la forma en lo que los perros los escuchan para que puedan vincularse al horror que es para oídos más sensibles y eso es justo lo que me pasa a mi en lugares donde hay muchos sonidos a la vez, me genera una sobre estimulación pero veo a las demás personas actuar como si no estuvieran notándolo y en efecto, no lo notan porque sus conexiones neuronales son diferentes a las mías, soy más sensible a los sonidos. Intentar hacer una observación clara se vería algo así: “Escucho, aun con la ventana cerrada, el ruido de los autos pasando en la calle, el de los niños jugando en el parque de la esquina, los pájaros que están llegando a los arboles del parque, ademas aquí, en nuestras oficinas del otro lado de la puerta puedo escuchar a los colegas en la cocinera calentando la comida en el microondas y acá dentro de la sala de juntas puedo escuchar que la silla rechina con el compañero que mueve la pierna, el sonido del ventilador del proyector y la cafetera que borbotea por el cafe hirviendo” y solo cuando los voy nombrando y ponen atención en cada uno de los estímulos es que su cerebro los reconoce como algo existente pero no lo suficientemente relevante como para que no les permita poner atención en la tarea en la que están enfocados.
Además en el párrafo de arriba solo estoy escribiendo sobre los estímulos auditivos, si me voy por los demás sentido sería algo así:
“Sumado a lo auditivo está el olor del cafe y el perfume que cada uno de ustedes trae puesto, el olor de los plumones de pizarrón con los que estamos escribiendo y el olor de la alfombra sintética que acaban de poner. También noto el brillo del reflejo del edificio blanco que entra por la ventana y las luces blancas de esta oficina y todo esto me está dificultando poner atención en lo que me estas preguntado…”
Poder nombrar una sola situación en una experiencia del mundo donde los sentidos están tan receptivos es un reto que los NT no enfrentan.
Yo crecí en una ambiente en el que se me enseño a enmascarar, que mis necesidades y mi perspectiva no era relevante y debía suprimirme para pertenecer/sobrevivir, mi sistema nervioso estaba activo cada vez que yo estaba en contacto con otras personas y mi espacio de relajación y liberación era lograr llegar al final del día acostarme y tirarme al espacio entre la cama y la pared para tener un poco de presión profunda porque a mi mundo no le interesaba saber lo que a mi me pasaba, solo era importante aquello que mejorara mi eficiencia o mis resultados para ser mejor hija o mejor estudiante y eso se quedó hasta mi adultes donde tenía que ser la mejor empleada.
Si se suman estas experiencias donde se aprende a enmascarar y donde nombrar una situación no va a hacer que esta experiencia sea compartida, el primer paso de la CNV se vuelve un gran reto, si se toma literal. Fue por eso que regresé al objetivo inicial del porqué hacer una observación en lugar de expresar juicios. Lo que se busca con esta metodología es desactivar la amigadla y activar la corteza prefrontal del cerebro es decir buscamos desactivar la parte que reacciona automáticamente como reflejo de sobrevivencia y conectar la parte del cerebro que nos permite una experiencia compartida.
¿Qué otras estrategias podemos encontrar para tener una experiencia objetiva compartida?